En una sesión plenaria, el Consejo Superior de la Universidad Nacional de Mar del Plata expresó su firme rechazo a las declaraciones del gobierno nacional, calificándolas como incitaciones a la violencia y al escarnio hacia aquellos que se oponen a sus políticas, especialmente en el ámbito universitario. Se manifestó la preocupación por el aumento de la violencia verbal, resaltando que el uso de términos como “terrorismo“ y “subversión“ para referirse a los movimientos estudiantiles y gremiales solo profundiza el conflicto y distorsiona los valores democráticos.
La declaración subraya la importancia del sistema universitario nacional como un espacio que brinda oportunidades de educación superior a miles de jóvenes, denunciando la estigmatización de estudiantes y autoridades electas democráticamente. En defensa de un modelo inclusivo, donde los estudiantes de sectores populares encuentran posibilidades, la universidad se compromete a salvaguardar el derecho a la protesta pacífica y a instar al gobierno a resolver los conflictos a través de canales institucionales.
La comunidad universitaria también demanda paritarias genuinas, mejoras en las becas estudiantiles y un presupuesto que fortalezca el sistema científico y tecnológico. Se insiste en la necesidad de una Ley de Presupuesto Nacional 2025 que aumente los recursos destinados a las universidades nacionales. La declaración enfatiza que la universidad continuará movilizada, defendiendo la educación superior como un bien social y un derecho humano, rechazando la violencia y trabajando en unidad para fomentar una nación libre e igualitaria.